Un perfume es más que una fragancia que te gusta llevar. Al elegir el que mejor se adapta a tu día, a tu horario y a tu estado de ánimo, dices mucho de ti mismo, a menudo incluso más de lo que conscientemente crees o pretendes transmitir. Para muchos, por tanto, es un accesorio importante capaz de expresar la propia personalidad, pero también de infundir confianza.
Pero se puede ir aún más lejos: también parece tener un poder sobre el estado de ánimo. He aquí qué emociones puede suscitar, cómo se compone y dónde vaporizarlo para conservarlo durante mucho tiempo.
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Fragancias y emociones: cómo elegir una para cada estado de ánimo
Los olores que se perciben tienen la capacidad de influir en los estados de ánimo, así como de despertar recuerdos. Por esta razón, elegir un perfume también significa querer enfatizar el estado de ánimo o tratar de desencadenar ciertas emociones en uno mismo.
Para ello, obviamente hay que conocerse a fondo y prestar atención a qué olores pueden despertar los sentimientos adecuados.
Aunque la percepción de las fragancias puede ser muy subjetiva, hay algunos olores que pueden afectar a las emociones humanas de manera bastante uniforme. Las fragancias de Victoria’s Secret, por ejemplo, también siguen esta línea, y consiguen evocar en quien las usa o percibe una sensación de felicidad, sensualidad, calma, energía o intelecto.
Veamos, pues, las principales notas aromáticas asociadas a los relativos estados de ánimo.
Positividad
Las notas cítricas como el limón, la cidra, el pomelo y la naranja tienden a tener la capacidad de alejar el estrés. Se definen como las notas de la positividad y el buen humor, y pueden contribuir a una sensación de vitalidad y energía.
Equilibrio
Para restablecer el equilibrio emocional y psíquico, las notas de pachulí suelen ser una elección ideal. No en vano, esta esencia perfumada se utiliza mucho en las prácticas de meditación y se dice que ayuda a relajarse y a levantar el ánimo.
Calma
Otra nota originaria de la India es el ylang-ylang, una fragancia que parece otorgar calma y serenidad y que puede considerarse el aliado perfecto cuando a uno le apetece desconectar.
Intelecto
Si hay una fragancia fresca y viva capaz de mantener la memoria y la concentración activas, ésa es sin duda la menta piperita.
Su olor es inconfundible y recuerda el aroma de la naturaleza. Aparentemente, es óptima para dar al cerebro el impulso de energía adecuado cuando todo presenta un buen motivo para distraerse.
Alegría
La lavanda es una de las fragancias más utilizadas, sobre todo en perfumes femeninos. Existe la creencia generalizada de que esta planta es capaz de transmitir serenidad y alegría y de relajar los nervios. Además, esta esencia también suele dar un toque de elegancia y delicadeza.
Feminidad
De todas las esencias, la canela es la que más se asocia con sentimientos de bienvenida, calidez y familiaridad. Sin embargo, también se considera un importante afrodisíaco y estimulante. Por eso se utiliza a menudo en perfumes que pretenden potenciar la feminidad y la autoconciencia.
Memoria
Por último, una fragancia que ayuda a mantener despierta la memoria y a despertar los sentidos es el romero. Esta nota del grupo olfativo aromático se encuentra en muchas fragancias masculinas. Suelen elegirla los hombres que quieren ser atrevidos e intentan quedar grabados en la memoria de quienes les rodean.
Cómo se compone un perfume
Para elegir un perfume, también hay que saber leerlo. No todo el mundo sabe que las distintas fragancias se componen esencialmente de tres partes: notas superiores, notas medias y las notas base. Cada una de ellas se percibe en un momento diferente, superponiéndose y caracterizando la armonía de un perfume. Veamos brevemente cómo.
Notas superiores
Las notas superiores son las que primero se perciben y, por tanto, son la tarjeta de visita de la fragancia. Suelen desvanecerse rápidamente. Las esencias pertenecen indicativamente a esta categoría:
- cítrico (vivo y estimulante);
- acuático (agradable y efervescente);
- fresco (picante e intenso);
- aromático (regenerador y persuasivo);
- afrutado ligero (enérgico y vivaz).
Notas medias
Las notas medias (“de corazón”) son las notas centrales, las que representan el alma del perfume, las que perduran un poco más y le dan carácter. Entre ellas se encuentran las notas:
- floral (femenino y sofisticado);
- lavado (delicado y fresco);
- afrutado oscuro (agradable y dulce).
Las notas base
Por último, las notas base son las últimas en desvanecerse y, por tanto, constituyen las fragancias más duraderas. Las notas de cola pertenecen a esta categoría:
- empolvado (refinado y aterciopelado);
- almizclado (intenso y persistente);
- vainilla (dulce y duradera)
- gourmand (único y apetitoso);
- ámbar y oriental (cálido y sensual);
- amaderado (masculino y enérgico);
- especiado (vivo y estimulante).
Dónde pulverizar el perfume para que dure mucho tiempo
Llevar un perfume, ya lo hemos visto, dice mucho de la propia personalidad y puede influir en el estado de ánimo, por eso a veces se desea que dure más. Una forma de conseguirlo, de hecho, existe: basta con aplicarlo en la parte adecuada. La zona más común del cuerpo son las muñecas, y luego hay que ir detrás de las orejas y en la zona entre el pecho y el cuello.
Las muñecas, de hecho, son ideales para rociar perfume y dejar que se difunda armoniosamente.
Por otro lado, se dice que la zona del escote es una de las partes más receptivas de la piel, donde se concentra la mayor parte de las glándulas sebáceas. Por eso, vaporizar perfume aquí ofrece la posibilidad de disfrutar de la esencia durante más tiempo, de forma gradual, suave y persistente.
Por último, la zona de detrás de las orejas también es óptima para difundir la fragancia, gracias a su proximidad a las glándulas sebáceas del rostro y al calor que emana del cuerpo.
Además de las zonas tradicionales, existen otras menos comunes, pero aparentemente eficaces, en las que se puede aplicar el perfume favorito. El principio es siempre el mismo: se trata de zonas más cálidas del cuerpo.
Una de ellas es la parte posterior de las rodillas, una zona rica en vasos sanguíneos que captan la fragancia y la difunden de forma envolvente y persistente. Lo mismo ocurre con la parte interior de los codos, más cercana en altura a la parte superior del cuerpo y, por tanto, percibida con mayor intensidad por el usuario y quienes le rodean.